Leão XIII e a Orientalium Dignitas de 1894:
“El papa entiende que los ritos sagrados tienen sólo una relación indirecta con la verdad de los dogmas católicos, si bien son expressión de ella. En este sentido, concibe los ritos como producto de la indulgente concesión de la Iglesia, que manteniendo inmutable la doctrina, permite una cierta variedad en las formas, sobre todo respecto a aquellas que gozan de una venerable antiguedad²³. Admite, por tanto, lo que califica como legítima variedad en la liturgia y en la disciplina que contribuye al decoro y utilidad de la iglesia²⁴”.
²³Acta Sanctae Sedis 27 (1894-1895)258.
²⁴OD, LA 14 (1894) 361; LE 4,138.